martes, 24 de agosto de 2010

La “Resurrección” de Enrique Galeano



Después de un año y cinco meses de haber desaparecido y mucha gente creyera, imaginara o dijera que fue asesinado tras sufrir crueles salvajes torturas luego de un invisible secuestro, el radialista Enrique "Kike" Galeano apareció con vida en San Pablo, Brasil. Resucitó lejos de donde se lo declaró muerto.
Galeano desapareció después de denunciar a presuntos contrabandistas de drogas y a protectores políticos de esos marginales que operan en la norteña localidad de Yby Yaú, departamento de Concepción, habían asegurado sus allegados.

Cuando la existencia del radialista se convirtió en un misterio asociado a la muerte y el cielo, se movilizaron organizaciones internacionales de América, Europa y hasta en el mismo Congreso Nacional paraguayo, a la velocidad que exigen esas circunstancias, se elaboró un proyecto de ley de pensión graciable para Bernardina Quintana, esposa del entonces desaparecido, a quien muchos parlamentarios públicamente lo declararon viuda y madre de varios niños huérfanos.

Se organizaron multitudinarias manifestaciones callejeras clamando por la reaparición de Galeano. Mientras por distintas radioemisoras y canales de TV de Asunción y del interior de Paraguay se realizaban permanentes llamados a favor del desaparecido, medios informativos internacionales se hacían eco de esas movilizaciones y campañas.

En fin, pasaron más de 16 meses y "Kike" Galeano resucitó para alegría y festejo de quienes fueron señalados como sus secuestradores o asesinos.

La sorpresiva "resurrección" también causó alegría entre quienes se empeñaron en buscarlo durante más de un año porque felizmente el radialista estaba bien vivo y lejos de donde desapareció.

"Hay que festejar porque está con vida", exclamó más de uno mientras otros se formulaban interrogantes en torno a las afirmaciones que formuló el vivaracho al oficializar su reaparición.

- Según diferentes medios, al reaparecer "Kike" Galeano dijo haber seguido a través de Internet toda la campaña desarrollada para su búsqueda. Si fue así, ¿porqué esperó más de un año para hacerse encontrar?. ¿Porqué no tuvo la iniciativa de enviar aunque sea un email a cualquier organización humanitaria informando que está vivo?.

- Al justificar su silencio por más de un año, "Kike" aseguró haber tomado esa actitud por temor a quienes lo amenazaron de muerte. ¿Será verdad esa afirmación? ¿Es creíble?.

- Indicó haber permanecido callado y oculto para proteger a su familia, por amor a los mismos. Si un padre de familia ama a los suyos, ¿constituye una demostración de amor hacia la esposa y los hijos permanecer oculto y en silencio quince meses?, ¿un perseguido o exiliado padre amoroso puede dejar de hacer una llamada telefónica al amor de su vida durante más de un año?.

La reaparición del radialista también plantea observaciones para quienes organizaron búsquedas de los restos del desaparecido por ríos, selvas, campos, pozos, cementerios y cuevas.

Las furibundas denuncias realizadas en torno al hecho sin presentar ni mostrar pruebas irrefutables ahora pueden tener negativas consecuencias hacia la credibilidad de quienes promovieron esas acciones.

Si mañana se registra la desaparición real de un periodista, ¿cree que la denuncia sobre ese hecho no generará dudas?
¿Qué opina usted?

No hay comentarios:

Publicar un comentario